Bosquejo: “Quien me cuida no duerme”: La santería cubana en los corridos tumbados sinaloenses
I. Introducción
- Impacto del corrido CH y la Pizza en la popularización de los corridos de collares.
- Emergencia de estos corridos como una nueva etiqueta dentro del género tumbado.
II. La santería en los corridos tumbados
- Eleguá como la deidad central en la santería cubana.
- La relación entre los corridos tumbados, la ostentación y el tráfico de drogas.
- Contexto del fentanilo en México y EE.UU.: crisis de salud pública y sobredosis masivas.
- Desplazamiento de las figuras tradicionales del narcotráfico (San Judas Tadeo, Jesús Malverde y la Santa Muerte) por la devoción a Eleguá.
III. Relocalización de la santería en México
- Expansión de la santería en tres fases (según Juárez Huet):
- Cine y música (1900-1959).
- Exilio cubano (Miami, Los Ángeles, Ciudad de México).
- Santería mixta (1990 en adelante) y su fusión con otras religiones marginales.
- Transnacionalización de la santería y su llegada al narcotráfico en Sinaloa.
- Posible introducción a través de Los Ángeles y Mexicali, más que desde la Ciudad de México.
IV. Primeros narcocorridos con santería
- Orishas y Yorubas (2018) – Máximo Grado: referencias espirituales y protección de Eleguá.
- El Ele (2019) – Marca Registrada: la santería como herencia dentro de una familia delictiva.
V. Los Chapitos y la santería
- Ovidio Guzmán y la devoción a San Judas Tadeo (El Culiacanazo, 2019).
- A diferencia de Los Zetas, los subordinados de Los Chapitos no replicaron el culto a Malverde, San Judas Tadeo o la Santa Muerte.
- Sucesión del poder de El Chapo hacia Iván Archivaldo Guzmán.
- Consolidación de El Nini como jefe de seguridad en Culiacán.
- Crecimiento de la santería en el entorno de La Chapiza.
VI. La influencia de Markitos Toys y Padrinito Toys
- Markitos Toys: influencer clave en la difusión de la santería en el narcocorrido.
- Padrinito Toys: líder espiritual dentro de la escena, introduce santería en los corridos.
- Participación de músicos como Luis R. Conriquez, Netón Vega, Óscar Maydon y Aldo Trujillo.
- Incorporación de rituales santeros en conciertos y videoclips.
VII. El auge de los corridos de collares
- Los Collares (2022) – Padrinito Toys y Óscar Maydon: consolidación de Eleguá como símbolo de poder.
- Fusión de espiritualidad y masculinidad triunfante en la narcocultura.
- Exaltación del consumo ostentoso, las “morras fresas” y la devoción.
- CH y la Pizza como parte de este fenómeno, posicionando la santería como una tendencia en el género.
VIII. El Azul y la narrativa del fentanilo
- El Azul (2023) – Peso Pluma y Junior H: himno de los corridos de collares.
- Mención de botones azules como referencia al fentanilo.
- Eleguá como protector de rutas de tráfico y símbolo de estatus.
- Nueva ética del narcotráfico: la paradoja del fentanilo (negocio sin consumidores leales).
- Fatalismo en la narrativa del narcotráfico: resignación ante el destino trágico.
IX. El declive de los corridos de collares
- Los corridos de collares reflejan un momento de apogeo y decadencia en la narcocultura.
- El Nini y El Piyi, figuras clave de esta estética, son capturados.
- A finales de 2024, las referencias a la santería en los corridos disminuyen.
- Migración del corrido tumbado hacia otros cárteles (e.g. CJNG).
X. Conclusión
- Eleguá como el símbolo que articuló poder, movilidad y estatus en la Chapiza.
- Los Chapitos utilizaron la santería como un elemento identitario para reforzar su autoridad.
- Relación entre devoción y criminalidad: la santería como código de poder en el narcotráfico.
- Pese a su declive, la santería en los corridos tumbados refleja la capacidad del narcocorrido de reinventarse y adaptarse a nuevas narrativas.
- Posible evolución del narcocorrido hacia nuevos códigos espirituales y simbólicos.
Leave a Reply